Friday, December 30, 2005

Amigos.



Emilio, un amigo al cual no veía hace unos años, decidió morir.
Otro amigo, Ezcámez, aún luchando por vivir... murió.


¡Cuántos amigos conocemos a lo largo de nuestras vidas!
Y doy gracias al cielo, por este magnífico regalo: los amigos.
Todos recordamos los nombres de amigos que hemos tenido en el colegio, aún cuando ha pasado muchísimo tiempo.
Reconocemos con algo de nostalgia, que durante nuestra adolescencia, hemos conocido a amigos que nos marcaron bastante en nuestras sucesivas relaciones. Esos colegas que comparten juntos, las nuevas experiencias en un mundo de adultos, hacia el cual nos dirigimos.
Risas, lágrimas, confidencias, borracheras, sexo, el primer cigarrillo...
Y a pesar de que haya pasado tanto tiempo, seguro que recuerdas sus nombres. Sus caras, sus gestos, sus risas.
Los amigos del pasado, nos hacen pensar en lo vivido. Y que deberíamos hacer un esfuerzo, para intentar volver a verles. Ya que sería bonito el recordar como éramos y ver lo que hemos cambiado.
Ya entrados en la edad adulta, continuamos creando nuevos amigos.
Pero seguramente, no tendrán ese toque de complicidad que tenían los de entonces.
Lo que pasa, es que nosotros hemos cambiado. Hemos olvidado esa parte algo loca, que durante los años de nuestra adolescencia, estaba a flor de piel.
Yo procuro no olvidar esas sensaciones de aquellos años. E intentar volver a sentirlas: eso que te hace sentir una chiquilla... eso que te vuelve a hacer bailar sóla a media noche en tu salón, puesta de pijama, mientras tienes la música a toda pastilla y ni si quiera piensas en lo que dirán los vecinos... eso que hace que pienses en los amigos yá pasados y en que te gustaría vivir con tus actuales amigos, todo tan inténsamente como con los que ya pasaron y a los que no olvidarás... eso que te hace que sientas que no hay nada escrito y que toda tu vida, está aún por escribir.

No comments: